Darwin Ranzahuer, el joven artista oaxaqueño que ha roto esquemas con su particular forma de expresar el arte invita a que este 29 y 30 de octubre de 19:00 a 22:00 horas, asistan y disfruten la exposición de tapetes y obra pictórica de artistas oaxaqueños representando a las tradiciones.
Este evento que será una velada en la cual podrás interactuar con los artistas, conocer el arte así como depositar tu ofrenda en el altar mayor en recuerdo a tus fieles difuntos se realizará en el Casahuate, Colonia el Vergel en San Pedro Ixtlahuaca.
EL ARTISTA:
Darwin Ranzahuer, Desde los 15 años, el arte tocó a su puerta e inspirado en la tendencia artística orientada al realismo mágico lo han llevado a experimentar con diferentes materiales y texturas.
Sus inicios se remontan al arte urbano en muros el cual practicaba con un grupo de amigos, con el paso del tiempo, ha logrado plasmar como marca propia dentro de su obra la simbiosis del sol y luna, que lo lleva a generar un eclipse de colores y formas.
Desde el 2005 destacó con sus murales urbanos obteniendo así la invitación por la Secretaría de la Juventud Municipal de Oaxaca, a impartir cursos de arte urbano a jóvenes, sobre quienes influyo para incursionar en esta maravillosa expresión.
En el 2010 Darwin toma talleres para adquirir mayores conocimientos de pintura sobre diversas técnicas como el óleo, encáustica (uso de cera como aglutinante), y tierras pigmentadas.
La calidad de su obra ha sido valorada por expertos y conocedores del arte, lo que lo ha llevado a participar en exposiciones personales y colectivas en Barcelona, España; McAllen, Texas; y en el país, en Monterrey, Guadalajara, Puebla, Querétaro, Oaxaca, Campeche, Mérida y Cancún.
Dentro del corazón de este joven promesa se guarda la relación con su entorno, por lo que en eventos de altruismo ha destacado en actividades sociales con sus talleres y con donaciones de su obra a diferentes fundaciones oaxaqueñas.
En su más reciente exposición Darwin Ranzahuer, busca transmitir recuerdos de su mágica infancia, siempre acompañándose de una exposición contagiada de colores vívidos y cálidos, que son los que le evocan y enaltecen la fantasía de la niñez. La armonía cromática en conjunto con las formas, generan un encanto y añoranza por sus memorias más tempranas.